Bardal es mucho más que la apuesta gastronómica de Benito Gómez en la ciudad de Ronda. Es un proyecto con pasión aliñado con los mejores profesionales para formar un equipo que consigue ganar con cada olor y sabor del mejor producto la satisfacción de sus comensales.
Gómez diseña platos que no son lo que parecen y cuyo significado real se descubre al probar, en el sabor. En Bardal, su nueva casa, consigue que los productos frescos tomen el protagonismo de su cocina con un sello propio y sin etiquetas. La pasión por la cocina envuelve el restaurante de arriba a abajo.
Una cocina andaluza puesta al día, que Benito Gómez ejecuta con mucho trabajo, pasión y una buena técnica adquirida sobre todo en sus años de formación, instruido en las técnicas de Ferran Adrià durante su estancia en la Alquería de la Hacienda Benazuza, en Sevilla o de Jean Luc Figueres. Gómez, busca la perfección y la aventura en cada uno de los platos que elabora.
Hay una sabia mezcla de sabores tradicionales con un toque creativo que conforman las tapas más novedosas como salmón marinado a la vainilla lima y yogur de huevas, chapata de carrillada gratinada, oreja de cerdo frita con salsa picante, lentejas estofadas con chorizo y foie reposado, Tataki de pato con arroz picante, cilantro y curry, o ostras al natural, entre otros. Sin olvidar la selección de magníficos postres artesanales.
